(Robin Hood Hidalgo - Enviado especial).- Un partido que no debió jugarse, generó una batalla campal en el estadio “Manuel Gonzales Prada”, cuando el equipo de la universidad San Pedro, se clasificó como representante regional al caer derrotado por 3 a 1 ante el Cultural Rázuri del centro poblado de Carhuayoc, equipo que ante la caída de 6 a 2 en Chimbote, quedó eliminado generando el descontento de parte del aficionado sanmarquino que llenó las graderías del escenario deportivo.
A pesar del triunfo, el equipo de Carhuayoc, quedó fuera de carrera, lo que indignó a más de 500 aficionados que llegaron del distrito de San Marcos, para alentar a la delegación rosada, generando un gran enfrentamiento entre los seguidores y la policía nacional.
Los barristas lograron ingresar al campo de juego que no presta ninguna garantía ni seguridad y a pesar de ello la LIDEFA programó este encuentro en el recinto huarino.
Este partido no debió jugarse nunca, por cuanto existía una Resolución de la Federación Peruana de Fútbol, dándole la razón a un reclamo del equipo del Juventud San Marcos y debió ser éste representativo sanmarquino, quien enfrente a la San Pedro, por cuanto los dirigentes del equipo de Juventud San Marcos, culpan de todos estos desmanes a los dirigentes de la LIDEFA.
Al término del partido la airada barra del Cultural Rázuri de Carhuayoc, en gran cantidad ingresó a la cancha y agredió salvajemente a los jugadores de la universidad San Pedro, lanzándoles piedras, botellas de gaseosas, palos, sillas y objetos contundentes que provocaron heridas en los integrantes universitarios, quienes huían raudamente de sus agresores por todas las calles de la ciudad de Huari.
Varias personas resultaron heridas, siendo el de mayor gravedad, el preparador físico Roberto Arizola Cuéllar, quien terminó con la cabeza rota y tuvieron que llevárselo sangrando al hospital de Huari.
Por otra parte, el director técnico Ricardo Roncal Torres, con lágrimas en los ojos, denunció que los vándalos de Carhuayoc, no sólo los agredieron físicamente, sino que aparte de atacarlos, les robaron todas sus pertenencias incluidos buzos, ropa, celulares y sus documentos, denuncia que fue presentada en la comisaría de Huari.
Testigo de todos estos hechos fue el Comandante PNP Marco Cáceres Peñaloza, quien cobijó a los jugadores del equipo sanpedrano y ordenó a los efectivos policiales a resguardar la ciudad y reponer el orden en las calles.
La policía de Huari, reportó la detención de tres agresores a quienes se les encontró infraganti encabezando éste ataque y arrojando piedras a los policías que defendían a la población que aterrorizada cerraba las puertas de sus negocios y se refugiaban en sus domicilios para evitar saqueos y ataques de parte de esta actitud delincuencial que hace quedar mal parado a la provincia de Huari.
Los pobladores de Huari, nos solicitaron que se aclarara que quienes cometieron estos delitos, son gente que no radica en esta ciudad, sino que azuzados por sus cabecillas llegaron desde Carhuayoc, para cometer estos latrocinios que empaña la Copa Perú en Ancash.
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