(DAROTI).- Tal como lo había anunciado a inicios de la campaña: “si no consigo el ascenso, dejaré el equipo”, sentencia que se cumplirá y que seguro, lo deben estar festejando sus detractores, entre ellos, el presidente regional y demás autoridades, así como las compañías mineras y también los periodistas que le pedían, haciendo eco de sus patrones, que Mallqui, de un paso al costado.
"A todos los hinchas les pido perdón, por no haber logrado la meta trazada, no solamente les pido perdón, también, les agradezco por el apoyo que me dieron, ustedes fueron los únicos que a diferencia de quienes usaron al equipo en su campaña electoral, nos brindaron todo su respaldo, yo hice todo lo que estaba a mi alcance, les vuelvo a pedir perdón y espero que sepan disculparme", atentamente José Mallqui Beas.
Ahora el camino está libre y veremos quién asume la responsabilidad, de seguir manteniendo al cuadro ancashino en la segunda división y lo devuelva al fútbol profesional.
No esperen demasiado, ahora es cuando deben coordinar la entrega del equipo, a aquellos empresarios, autoridades y demás presurosos personajes, que decían querer tomar las riendas del club auriverde.
Deben salir al frente los periodistas que exigían que Mallqui, se vaya del equipo, demuestren que sus pedidos no eran cantos de sirenas y presenten al nuevo presidente.
Lástima que los jugadores, le dieran la espalda a los hinchas y más por pensar en su dinero, se olvidaron de entrenar y de su compromiso con la hinchada.
Es cierto y estaban en su derecho de exigir sus pagos, pero, acaso no se acordaron que si llegaban al fútbol profesional, les iban a tener que cancelar todas sus deudas, no pudieron esperar un poquito más y entrenar para fortalecerse y vencer las dificultades y problemas que pasaron, debieron haberlo hecho por la hinchada, que siempre los apoyó.
Se cierra amargamente otro capítulo del “retorno”, se tendrán que hacer las evaluaciones y correcciones, que permitan no volverse a equivocar, la hinchada no se lo merece, no se deben seguir matando ilusiones, no se puede permitir que se siga jugando con los sentimientos del verdadero hincha, de aquellos que teniendo poco, lo dieron todo…
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