(DAROTI).- En estos días, escuchamos, vemos y leemos en los diversos medios de comunicación, una andanada de noticias referidas a la niñez y la juventud, que están mal encaminadas y muchos de ellos y ellas, inmersos en actividades nada buenas para su formación.
También, se habla mucho de la falta de semilleros en el deporte, especialmente en el fútbol, cuando ven que en el Sport Ancash, faltan corazones huarasinos, más de uno se pone en plan de “criticón”.
Mientras tanto, las soluciones a los álgidos problemas que amenazan a la niñez y juventud, saltan a nuestra vista, pero, lamentablemente, los llamados a encaminar esa vitalidad y fuerza infantil y juvenil a un mejor futuro, se hacen los ciegos, sordos y mudos.
Autoridades de todos los niveles, profesores de Educación Física, entrenadores, directores técnicos, directores de instituciones educativas, profesores de otras asignaturas, dirigentes de las ligas deportivas, dirigentes de los clubes deportivos; todos ellos viven de espaldas al mensaje claro y concreto: el deporte bien concebido, con planes de desarrollo y proyectos serios, brinda una buena formación integral y una vida llena de salud y vigor para emprender las tareas de la vida diaria y no seguir reprimiendo, si antes no educamos y fortalecemos a la población infantil y juvenil a través de la práctica deportiva, con responsabilidad y trabajo con profesionales en el mencionado campo.
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