El gol rosarino llegó apenas a los dos minutos de iniciado el partido, con
el buen centro de Ronaldo Andía, para la aparición del goleador Tulio
Etchemaite y cambiándole la dirección al balón con golpe de cabeza, derrotó a Diego Penny, el tanto nos hizo pensar en positivo.
Después, los arequipeños
tomaron el control del medio campo y crearon situaciones de gol, que el buen
Salomón Libman, se encargó de evitar.
Nuevamente el juego en equipo estuvo
ausente, las jugadas personales, olvidándose del compañero mejor ubicado y la
marca asfixiante de Melgar, hicieron que la defensa se batiera con todo y el
portero Libman, se erigiera como la figura.
El empate se produjo sobre los
34 minutos, con Bernardo Cuesta, que aprovechó un buen servicio por la zona
central, incursionando en el área y rematar cruzado sobre la marca de José
Canova.
Fue un golpe duro para los rosarinos y con más empuje y centros por las
bandas, se volcaron en busca de la diferencia, que llegó cuando se terminaba el
partido a través de Raúl Tito, para el festejo de un triunfo importante en casa, que permite sumar tres puntazos.
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