martes, 6 de octubre de 2015

AURIVERDES NO LA VEN EN CALIDAD DE VISITANTES

(DAROTI).- En las afueras y dentro del recinto deportivo de Casma, se suscitaron hechos contrarios a las buenas costumbres, lo sufrieron los hinchas ancashinos y también los jugadores.
El arbitraje de Giovani Quevedo, permitió el juego fuerte, que es válido, pero no, las intervenciones violentas y mal intencionadas de Galliquio, Durán, Gonzáles, y Ojeda.
La ausencia de Josshimar Pacheco, quieran o no aceptarlo, se hizo sentir en la mitad de la cancha, por lo mismo, Pacheco, debe pensar más en el equipo y dejar de lado sus berrinches, cada vez, que los árbitros sancionan alguna jugada en su contra o de sus compañeros.
Los ancashinos se olvidaron de jugar y solamente atinaron a replegarse en su cancha y regalarle el balón a los casmeños, fue una constante, apenas un par de corridas con Zalón, que tuvo una clara y la desperdició.
El nuevo técnico de Delusa Moisés Varas Bardales, motivó a sus jugadores, puso en acción un buen plan táctico para tapar a Charún y confió más en el despliegue de Talledo y Ojeda, que en la parsimonia de Chacaliaza y por eso controló el esférico y jugó en cancha ancashina, lamentablemente para ellos, con poca profundidad y ocasiones claras de gol, salvo, el disparo de Jaime Orihuela, cuando el balón pasó cerca al parante del arco de un atento Jave.
El gol casmeño llegó a los 31 minutos del segundo tiempo, luego de una jugada de Jack Durán, que aprovechó el descuidó de la zaga ancashina, que hasta ese momento había sido una muralla contra la que se estrellaron los "griferos".
Durán, sacó un remate cruzado, que se iba desviado y por el centro del área y sin marca estuvo Luís Farías, que puso el pie izquierdo, para cambiarle de dirección al esférico y dejar sin acción al portero auriverde, goles...son goles y ganó Delusa.
Están en deuda, de los dos encuentros jugados como visitantes, los ancashinos no han sacado nada y eso, con el nuevo formato de la Copa Perú, te puede dejar fuera de la fiesta.
Los "guerreros de Dios", están bendecidos, EL SEÑOR los va a cuidar siempre, pero, para ganar los partidos de fútbol, se necesita entrega de los jugadores, porque, EL SEÑOR , no lo hará todo, se requiere COMPROMISO y hambre de gloria.

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